Paralelamente se reforzaron los operativos de control.
Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) espera que las filas por diésel desaparezcan en el transcurso de esta semana, tomando en cuenta que se envía a los surtidores volúmenes superiores a la demanda, desde plantas de almacenaje.
“Toda la semana vamos a estar con despachos sobre los 3 millones de litros cuando lo normal es despachar 2 millones y un poquito; entonces las filas van a ir bajando durante toda la semana”, explicó el presidente de la estatal petrolera, Armin Dorgathen, en contacto con Red Uno.
Indicó que “como es compromiso del Gobierno nacional”, desde el sábado pasado se despacha mayores volúmenes de combustibles, tanto diésel como gasolina, a las estaciones de servicio en el territorio boliviano.
“Venimos despachando normal desde la semana pasada”, aseguró.
Sin embargo, recordó que si bien ahora los despachos desde plantas de almacenaje son normales, se debe “cubrir el bache” de los más de 20 días de bloqueo evista en el departamento de Cochabamba, entre octubre e inicios de este mes, que impidió el paso de cisternas y el abastecimientos de carburantes a diferentes sectores.
Entre los sectores afectados estuvieron el transporte y el agro, principalmente.
“Para el sector productivo tenemos acuerdos, estamos trabajando con el sector productivo (con) listas todos los días para poder brindarle el diésel, porque tenemos el producto, brindarle el diésel al sector productivo”, indicó.
Enfatizó que este trabajo es coordinado diariamente con la Asociación de Productores de Oleaginosas y Trigo (Anapo) de Santa Cruz.
El domingo, el ministro de Hidrocarburos y Energías, Alejandro Gallardo, informó que en Bolivia habitualmente se despachan a diario 7 millones de litros de diésel, pero ante la demanda se incrementó este volumen a 9 millones de litros diarios, de los que 3,5 millones son despachados y distribuidos en Santa Cruz para atender la demanda del transporte y del sector productivo.
Paralelamente se reforzaron los operativos de control, para evitar el contrabando y el desvío a actividades ilícitas de los carburantes. La Policía y la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH) tienen la responsabilidad de controlar y fiscalizar.
MC/ABI
