“Bolivia por fin comprende que ya no tiene más la sartén por el mango en materia de gas natural en la región”, dice el analista de GELA, Álvaro Ríos.
(#RadarEnergético)_ Después de medio siglo de exportación ininterrumpida de gas natural a Argentina, en octubre próximo Bolivia dejará de enviarle gas al vecino del sur debido a la declinación de la producción y más bien será Argentina la que tendrá capacidad exportadora con la que busca llegar al mercado brasileño.
Unas de las opciones es hacerlo por la infraestructura de ductos que tiene Bolivia, para lo cual se debe revertir el sentido del flujo con inversiones menores a las que tendría que hacer si construiría nuevos gasoductos entre Argentina y Brasil.
“A partir de octubre de esta gestión, Bolivia podrá transportar 3 millones de metros cúbicos día (MMm3d) de gas argentino al mercado brasileño”, dijo el presidente de YPFB, Armin Dorgathen, este miércoles, citado en una nota informativa de la empresa.
La estatal petrolera dice que trabaja en “proyectos de adecuación que permitirán transportar en mediano plazo volúmenes mayores a los 10 millones de metros cúbicos día (MMm3d)”, asumiendo así su nuevo rol arrendador de ductos para el paso del gas argentino.
“En este momento, no tenemos competencia porque contamos con un sistema consolidado, operativo y seguro que nos permitirá transportar de manera eficiente y competitiva gas natural desde Argentina hacia los principales mercados de Brasil como lo es Sao Paulo”, asevera el ejecutivo.
Con más de 1.000 km de gasoductos que atraviesan el territorio boliviano, el Sistema Integrado de Transporte de Gas Natural de la petrolera boliviana YPFB está listo para transportar el gas argentino al mercado brasileño, apunta.
El Sistema Integrado de Transporte de Gas Natural de Bolivia cuenta con los ductos de YPFB Transporte (GIJA), YPFB Transierra (GASYRG), Gas Transboliviano y Gas Oriente Boliviano (infografía).
“La coyuntura lo permite con la consolidación de los proyectos de reversión del sistema norte de gasoductos argentinos”, describe.
POR FIN
“Bolivia por fin comprende que ya no tiene más la sartén por el mango en materia de gas natural en la región”, dice el exministro de Hidrocarburos y analista de la consultora energética GELA, Álvaro Ríos”.
Por lo tanto, dice Ríos, “se han dado cuenta que los productores argentinos ni los compradores en el lado brasileño están dispuestos a entregarle a YPFB un monopolio en la compra y venta de gas natural”.
En ese sentido, valora el reconocimiento de la estatal boliviana de asumir su nuevo rol, en el que, “lo racional es que YPFB pueda establecer mecanismos claros y transparentes para transportar el gas al mercado brasilero y, también, dentro del mercado interno, porque en 2029 estaremos comenzando a importar gas natural de Argentina”, reflexiona.
Al respecto de utilizar los ductos bolivianos para transportar gas argentino a Brasil, Ríos recomienda que “se pueda establecer una metodología de transporte por tramos, con puntos de entrada y salida” porque eso optimiza los mercados, apunta.
Recientemente Argentina y Bolivia firmaron su novena adenda al contrato de compraventa que prolonga el suministro de gas boliviano en el periodo de invierno, hasta septiembre, mes en el que Argentina bajará su demanda y al mismo tiempo habrá terminado la reversión de sus gasoductos para llevar gas desde sus yacimientos de Vaca Muerta a sus provincias del norte, mercado natural de Bolivia.
