El exministro de hidrocarburos de Bolivia y consultor de GELA, Álvaro Ríos Roca, recomienda que se deben hacer todos los esfuerzos para que el gas transite por los gasoductos de Bolivia que van quedando con capacidad ociosa. Es un “win win” (ganar-ganar) para los tres países hacerlo con infraestructura existente, dijo.
(#RadarEnergetico)_ “Nuestro norte es el proyecto de gas natural licuado”, dice el presidente de YPF, Horacio Marín, al ser consultado sobre el rol del gas argentino en la región.
Aunque las reservas de gas de los yacimientos de Vaca Muerta, de 308 Tcfs, son tan grandes que “se puede pensar en los mercados regionales”, matiza.
El ejecutivo fue parte de un panel, junto a Shell y TotalEnergies, en el marco de la semana Arpel-Naturgas, uno de los mayores foros energéticos regionales realizado del 8 al 12 en Cartagena de Indias, Colombia, en el que estuvo presente Radar Energético.
En ese marco, plantea que en pocos años podrían exportar 18 millones de metros cúbicos diarios (MMmc/d) a Chile, por diferentes gasoductos ya existentes y que “también con la reversión del gasoducto del norte, por la declinación que tiene la producción boliviana, se podría exportar a Brasil”.
Sin embargo, “no veo a Brasil que en 20 años siga consumiendo el gas de afuera, pero lo veo como un mercado de oportunidad donde argentina tiene que tomar ventaja”, enfatiza, argumentando que a Brasil se le debe exportar mediante el proyecto de GNL y, sólo “por un tiempo”, por los gasoductos bolivianos.
Para ello, según el plan de desarrollo de los yacimientos de Vaca Muerta, a inicios de 2030 Argentina debería estar produciendo 120 MMmc/d diarios, el doble de lo que produce actualmente.
Con ello planea exportar a inicios de la década de 2030 el valor de 30.000 millones de dólares anuales en gas natural.
Por su parte, el ex secretario de Hidrocarburos de Argentina, José Luis Sureda, coincidió, por separado, con el ejecutivo de YPF al afirmar que “la opción más competitiva para llegar a Brasil con gas de Vaca Muerta es mediante el GNL”.
“La posibilidad de exportar gas natural al norte de Chile, Bolivia o Brasil está sobre la mesa. No estoy seguro que llegar al mercado brasileño a través de Bolivia sea la mejor opción porque siempre estas cuestiones aumentan el riesgo de cualquier tipo de proyecto”, dijo, citado por Mejor Energía TV, de Argentina.
“Argentina tiene una oportunidad de exportar gas a la región que no tiene precedentes históricos, gracias al enorme potencial de Vaca Muerta. Puntualmente este invierno podríamos tener algunos problemas de abastecimiento en el gasoducto del norte por dilaciones en las obras de transporte, pero es meramente coyuntural. Fuera de esto, el panorama para el país es extraordinariamente bueno”, dijo en otro momento de la entrevista.
A decir del ejecutivo de YPF, Argentina planea tener montadas en 4 años, dos plantas flotantes de licuefacción de gas natural para exportar a los mercados internacionales, lo que implica a su vez construir tres gasoductos de 36 pulgadas cada uno y toda una infraestructura adecuada para el enorme desafío.
El proyecto Argentina LNG “va tener un nivel competitivo a escala mundial (…) estoy convencido que el proyecto va a ser una realidad”, puntualizó Marín.
Bolivia tiene ductos de exportación de gas hacia Argentina desde la década de 1970 y, hacia Brasil desde 1999. Ambos han sido sus mercados de gas desde entonces, pero ahora la declinación de la producción local está dejando en capacidad ociosa esos caños.
REUNIÓN DE CANCILLERES
Por su parte, este lunes se reunieron en Brasilia, los cancilleres de Argentina y Brasil, Diana Mondino y Mauro Vieira, respectivamente, en cuyo encuentro manifestaron estar alineados en los intereses de sus países para avanzar en acuerdos energéticos.
«Todo esto es de interés mutuo. La producción está en Argentina y la necesidad está en Brasil. La producción satisface nuestras necesidades y las de Brasil. Entonces hay un alineamiento de intereses», afirmó la canciller argentina.
En el encuentro no se mencionó la posibilidad de llevar gas argentino por los ductos bolivianos ya existentes.
El exministro de Hidrocarburos de Bolivia, Álvaro Ríos enfatiza que se debe dejar a los productores privados de Argentina negociar con los compradores en Brasil y poner una regulación y una tarifa escalonada con marcadores e indexaciones predecibles para viabilizar que el gas sirva para desarrollar el mercado industrial firme de Brasil que tiene precios elevados con la competitividad de los costos de producción de gas en Argentina.