En 2023 operó al 25% y tuvo un paro de 80 días por mantenimiento.
(#RadarEnergetico).- Desde su puesta en marcha el 14 de septiembre de 2017, día de Cochabamba, la Planta de Amoniaco y Urea casi siempre operó a media máquina, o peor aún a un cuarto de tonelaje. El mejor performance registrado fue en 2022, año en el que produjo a mitad de su capacidad instalada.
Esa tendencia se ha mantenido en 2023, año en el que la planta instalada en Bulo Bulo, Cochabamba, operó al 25%.
La mayor parte de la producción de urea es destinada al mercado externo. Según YPFB, el mercado local consume alrededor del 15%.
En el primer trimestre de este año, el volumen de exportación fue de 790 toneladas diarias, llegando a vender al mercado externo un volumen de 71.00 toneladas en 90 días, según datos del INE, consolidados por la consultora Gas Energy.
PARADAS
Solo en 2022 los paros de planta sumaron alrededor de 50 días, tomando en cuenta 17 días en julio y más de 30 días entre septiembre y octubre.
El historial de funcionamiento respecto a su capacidad instalada no ha superado el 50% en promedio anual.
El año de su inauguración operó al 4%, al año siguiente en 36%, en 2019 al 43%, en 2020, año de la pandemia de COVID y de una larga paralización operó al 1%, en 2021 al 21% y en 2022 al 48%.
El promedio general de funcionamiento de la planta respecto a su capacidad instalada desde 2017 hasta agosto de 2023, llega al 27%, según Gas Energy Latin America (GELA), en base a datos oficiales.
Los continuos paros dan luces de problemas estructurales en la planta, misma que costó ya cerca de 1.000 millones de dólares y altos costos de reparación. El volver a ponerla en marcha en 2021 demandó $us 53 millones “para su normal funcionamiento”, según YPFB.
Según reportes de prensa, la planta habría parado actividades en al menos 17 ocasiones desde 2017.
El paro más reciente duró 80 días, desde junio hasta el 4 de septiembre, cuando YPFB informó que volvió a entrar en operaciones.
La planta funciona con gas a precio subvencionado, cinco a seis veces más barato que el precio de exportación.
Por otro lado, desde agosto de 2022 hasta mayo de 2023, el precio de la urea en el mercado internacional ha perdido 450 dólares de su valor por cada tonelada, pasando de 773 dólares a 321 en ese periodo. 58% menos.
La facturación cayó en más de $us 100 millones entre un periodo y otro. En el primer semestre de 2023, YPFB facturó $us 46 millones, mientras que en 2022 llegó a $us 160 millones.