El pasado mes de marzo, a los pocos días de que estallara la guerra en Ucrania, el presidente de Lukoil había pedido a Vladímir Putin que pusiera fin a las hostilidades en Ucrania, mostrando que no compartía las maniobras del Gobierno ruso en el país vecino. Desde que comenzara la invasión rusa en Ucrania, nueve oligarcas rusos han muerto en extrañas circunstancias.
Nueva y misteriosa muerte en Rusia de los opositores a Vladímir Putin. El presidente de la petrolera rusa Lukoil, Ravil Maganov, ha muerto este jueves tras “caer por una ventana” del Hospital Clínico Central de Moscú donde estaba ingresado, informan las agencias rusas Interfax y TASS.
«Maganov se ha caído por la ventana de su habitación en el Hospital Clínico Central esta mañana. Ha muerto a causa de las heridas», indica una fuente anónima a Interfax.
Maganov, de 67 años, estaba ingresado en el hospital por un ataque cardíaco y tomaba antidepresivos, según la misma fuente El presidente de Lukoil trabajaba desde 1993 en la petrolera en puestos ejecutivos. Fue primer vicepresidente ejecutivo y supervisó las exploraciones y producciones.
En 2020 la junta directiva de Lukoil nombró a Maganov como presidente en lugar de Valeri Greifer, quien falleció en abril de ese año.
A los pocos días de que estallara la guerra en Ucrania, el presidente de Lukoil había pedido a Vladímir Putin que pusiera fin a las hostilidades en Ucrania, mostrando que no compartía las maniobras del Gobierno ruso en el país vecino.
“Defendemos el cese inmediato del conflicto armado y apoyamos debidamente su resolución a través del proceso de negociación y por medios diplomáticos”, señaló la empresa que dirigía, en un comunicado en marzo. Algo que no fue del agrado de los impulsores de la guerra.
CRÍMENES DE MAGNATES RUSOS
El 10 de mayo, el oligarca ruso Alexander Subbotin, el exgerente también de Lukoil, murió de manera sospechosa en medio de la invasión rusa de Ucrania. Fue encontrado muerto en el sótano de la casa de un chamán en Mytishchi, una ciudad al noreste de la capital, Moscú, después de sufrir un aparente ataque al corazón.
En marzo, dos multimillonarios rusos, Serguéi Protosenya y Vladislav Avayev, magnates y empresarios del gas, asesinaron presuntamente a sus familias antes de quitarse la vida, al mismo tiempo, en España y Rusia.
Según reporta el diario español ABC, desde que comenzara la invasión rusa en Ucrania, hasta nueve oligarcas rusos han muerto en extrañas circunstancias.